Tras el anterior balance anual, y casi a modo de tradición de este humilde blog, me permito repasar el año que acabamos de dejar atrás, el año 2021. Una de las métricas que utilizo para ver si ha sido bueno o malo, al menos en lo que a mis gustos se refiere, es el número de vinilos que he adquirido (una métrica completamente arbitraria por otra parte): se acerca a la setentena, lo cual pese a ser un número que en pleno año 2021 puede parecer poco, es relevante dado el nuevo interés que despierta el formato plasticoso y friki por excelencia en el mundo de la música. Son menos que en 2020 y 2019. No lo considero malo, pero es cierto que la tendencia es a la baja… a tener en cuenta.
Uno de los sellos más relevantes de este pasado año sigue siendo Prspct. Siguen apostando fielmente por el vinilo tras su abandono de su catálogo fragmentado en sub-sellos, ofreciendo el mismo abanico de opciones que ya ofrecía hasta ahora, desde el Hardcore Industrial, al Drum and Bass más duro. Celsius, Strange Arrival, TOA, Akira, Limewax (con un disco de remixes espectacular), Warr (y su breakcore metalero) o los álbumes de Detest (muy bueno) o Deathmachine (espectacular y variado), son parte de su catálogo en este año pasado. Mi más sincero apoyo a la iniciativa sónica de Thrasher desde Rotterdam.
Otro de los nombres relevantes de la escena, Thunderdome, se ha dedicado no solo a devolvernos el tradicional recopilatorio (del cual hablé en la anterior entrada) sino también a recuperar una suerte de sello donde irán editando material exclusivo. Se han juntado con nada menos que gente como Dither, N-Vitral, Promo u Ophidian. Desde mi punto de vista, es éste último con su álbum Call of the void el que se ha llevado el gato al agua, aunque seguramente no sea el que más se reproduzca en las principales plataformas de streaming. No obstante, Ophidian sigue fiel a su estilo, a su forma de producir, y nos regala varios himnos, más allá de su tema usado en el anterior Thunderdome, que resultan interesantes para el público más comercial y underground a la vez. Nada fácil, pero conseguido por el tito Conrad. Esperemos que siga así.
Dos sellos «grandes» holandeses tambien han contribuido generosamente al catálogo disponible de este 2021. Masters of Hardcore, que despide el año con su habitual y «objetivo» Top 100. Para sorpresa de nadie, Angerfist copa su Top 100 y mete varios de sus temas en el Top 10. Su ciclo de releasing ya cuadra perfectamente con la edición de este Top, lo que hace que sus temas estén frescos en la memoria colectiva de su fandom. Ya solo editan digital, pero desde luego cuentan con infinidad de seguidores y sigue siendo, con permiso de Thunderdome, la marca que más exporta el sonido holandés, con Angerfist, Tha Playah, Miss K8, los españoles Broken Minds, Furyan o Deadly Guns a la cabeza. Sirvan estos dos ejemplos, el obligado número uno para los acólitos de MOH y un tema de N-Vitral que a mi me ha parecido decente dentro del catálogo de la cabra.
El otro gran sello holandés, el capitaneado por Promo, The Third Movement y su división Heresy, también nos han entregado cosas interesantes. De hecho, este último sub-sello, Heresy, nos ha traído de vuelta al gran Embrionyc, uno de los más talentosos productores alemanes. Siempre es una muy buena noticia que productores como él recalen en sellos de más difusión que otros más nicho como Dark.Descent (sin desmerecer). También han editado el álbum de Djipe, al cual todavía no he podido dedicarle el tiempo que requiere. El material de este hombre no es lo que se dice easy-listening, pero siempre resulta interesante.
Por el sello digamos padre, TTM, han editado cosas tan interesantes como el último trabajo de Void Settler. Lo poco que he podido catar, sin duda me deja con ganas de echarle un oído al vinilo en condiciones, puro sonido Void Settler, siempre inclasificable. Además de algún temilla suelto de Promo (no ha sido su año), encontramos a Detest, a los antes mencionados Djipe y Embrionyc, Penta o al español The Empire, Hysta (que es como el gran fichaje del sello, no sé bien porqué), Nanostorm (buenos temas si señor) o Iridium, un fichaje que también destacó el propio Promo en la entrevista que le hicieron recientemente los amigos de Oblivion Underground. Tengo la sensación que TTM no está cómoda jugando a agradar a ambos lados del espectro del Hardcore, y eso la deja en una tierra de nadie que otros juegan más a placer (MOH por un lado y quizá Prspct por el otro). No obstante, siempre es un sello a tener en cuenta.
UK Hardcore
Otro de los sellos que siempre tengo puesto en el punto de mira es Deathchant. El sello de Cobby llega ni más ni menos que al número 100 de su catálogo en plena forma, especialmente el mismo Hellfish, demostrando que el confinamiento ha hecho que entregue unos cuantos temas, no ya sólo en su fantástico King of the Ironfist, sino en su reciente Now that’s what I call Hellfish vol. 5. Y es que este sello merece su propia entrada de blog (me comprometo a ello) ofreciendo un repaso por su dilatada trayectoria, referencia del sonido inglés y cuna ya no sólo de Hellfish, sino de muchos otros productores de renombre de la escena, incluyendo a los ahora omnipresentes The Dj Producer o Dolphin entre otros. Ah! y siempre apostando por el formato vinilo, ni os cuento como me hallo solo de pensar en echar el guante a esa edición especial para el número 100. Mientras tanto, os dejo uno de mis temas favoritos de su último álbum.
Y antes de ponerme a repasar más cosas y como estoy hablando de UK, os recomiendo si no lo conocéis, que le déis un repaso a la discografía del señor Alan Reeves, más conocido como Micron. Todavía me estoy recuperando de lo épico de Icarus, su último álbum por Irrational Impulses, sello que lleva él mismo y en el cual edita su material más personal.
Micron es uno de aquellos productores que hace lo que quiere y se nota. Su material se editó antaño por sellos como Psychik Genocide o Deathchant entre otros, pero es en su sello, donde podemos encontrar su material más íntimo, lejos de convencionalismos, influido por todo tipo de sonidos y nada encorsetado. Algo que se agradece hoy día, donde lo habitual es encontrar temas «fórmula», donde todo suena muy similar. Una pena que todo su material no se edite en vinilo. Os lo recomiendo, de veras. También os recomiendo que echéis un ojete al proyecto de Joe ET, Oblivion Underground, donde además de editar vinilos, ofrecen su show con él mismo y Dolphin además de numerosos invitados, lo cual lo hace especialmente interesante.
¿Y el Gabber?
Con respecto al mundo más Gabber, hay que decir que se sigue editando en vinilo. Como destacados, el disco de Gabberhead tiene una pinta espectacular. El señor X-Fly sigue empeñado con su proyecto Gabbadome, con un último vinilo de Zirax realmente bueno. Ruffneck sigue editando en vinilo, su icónico picture-disc y el disco del ucraniano Kirlian. Mokum sigue también editando material, más en digital que en físico, pero merece la pena escuchar lo que incluyen los dos vinilos del recopilatorio Fucking Hardcore 13. Espectacular la remezcla de Formek del Quantum Theory, además de incluir la colaboración de los compatriotas Rottencore y Greensequence. Buen trabajo. Además, y no puedo más que alegrarme por él, mi tocayo Gabberfucker ha editado dos referencias por Gabberhead y una por Mokum. No están en vinilo, pero no tardará, ya que desde luego su sonido bien lo merece. Ha sido un gran año para él, y para nosotros por poder disfrutar de su material. Os dejo uno de sus temas que más me ha hecho tilín.
Kowa sigue apostando por seguir editando en vinilo, ya no solo para llenarnos las maletas de pictures, sino por reeditar temas antiguos de Dwarf, Babyboom, Forze, Rob Gee… una mina desde luego que muchos coleccionistas agradecemos, incluyendo un vinilo Back in Time con temas nuevos que incluyen un tema no editado de Predator (solo visto en un Thunderdome). También Waxweazle vuelve al ruedo con la edición de su sonido de antaño en vinilo; no son sus mejores temas pero oye, tienen su aquél. SODOM ha editado un par de vinilos este año también… ¿dije en algún momento que me mola mucho el rollete de Desolation? Haga lo que haga, lo peta. El vinilo por Komum es buenísimo. También me ha molado mucho el último disco de Tripped por Hong Kong Violence, aunque he de reconocer que lo que ha editado últimamente por Madback también me tira. Por cierto, uno que colabora con Tripped en Madback es [KRTM]… qué decir de su álbum, probablemente de lo mejor del año (hasta el video quita el hipo).
Hemos tenido vinilo de Epiteth, y los amigos de Toolbox, se han empeñado en rescatar temas Frenchcore (el auténtico) e Industrial olvidados y plancharlos por Hardcore Industrial Crew. Merece la pena mencionar la labor de los distribuidores como Toolbox, que son vitales para que el Hardcore en el 2021 siga llegando a nuestras maletas con la calidad que estos discos atesoran. Un diez para ellos. Ah! Y desde Synderesis, el último de Taciturne en vinilo azul chicle, desde luego, no debe quedar mucho del productor alemán por recuperar… Y una última mención para la iniciativa de Aneurysm Recordings, donde prometen incluso editar un vinilo de Disciples of Belial este 2022… casi nada. De momento, 2021 les ha visto nacer con un vinilo que no está nada mal.
Como veis, a pesar de empezar diciendo que no había mucha cosa este año, me he explayado lo mío. De hecho me he dejado cosas por contaros (Scuderia me viene a la cabeza ahora mismo), pero merece que vosotros indaguéis en el maravilloso mundo de las redes sociales, bandcamp y youtube. Es cierto que hay mucha basura, mucha música de usar y tirar, pero siempre hay joyas que resistirán el paso del tiempo y que merecen la atención aunque sea de este humilde blog… y más si están editadas en formato físico. Y tu, ¿Qué canción, álbum o artista crees que ha destacado este pasado 2021? Ah! Y feliz año…